se produjo en las Merindades....Cuenta la leyenda que un sevillano con un arte que no se pué aguantá y un segorbino/carricano con las manos de un joyero, abdujeron a todos los kdjoteros y amigos allí presentes e hicieron que desaparecieran todos los coches del circuito hasta solamente quedar un 95 y un 90, asegurando los testigos que los inclinómetros de ambas máquinas utilizaron sus paracaídas para salir de los salpicaderos diciendo: -"ahí sus quedáis..."
Fue en ese momento cuando, desafiando las leyes de la gravedad, comenzaron a descender 2 Toyota por la ladera pensando el respetable que estaban locos, y la verdad que no iban desencaminados, porque más de uno pensó que algún coche se iría a Granada en grúa o a Segorbe remolcado...
Pero cuando el gruero (véase señor de la grúa) de Medina de Pomar se frotaba las manos pensando en el agradable viaje que iba a pasar junto a Co y su entrañable amigo en la pequeña cabina de ese camión grúa, hasta el sur escuchando buen Rock y fumando mientras los 3 engullían kms. con el 95 volcado detrás, ocurrió lo que nadie de los presentes pensaba menos Co, el 95 se deslizó por la pendiente teniendo una parada forzada (y gracias) y bajando de una sola pieza hasta abajo....momento en el cual más de uno respiró aliviado pensando que Co podría ir tranquilo a poner esas caras tan singulares cuando le hiciesen las fotos de todos los premios y regalos que iba a recibir....
Luego TOYOCARRICA ya se encargó de hacer disfrutar al público ya con menos susto en el cuerpo, hasta el punto de rifarse los buenos sitios para verlo en la reventa, de que se vendiesen perritos calientes y bebidas para seguir la exhibición o de subastarse por Ebay las piezas del 90 que iban cayendo mientras avanzaba el Toyota, como si de piezas de colecionista se trataran...
En fin, una mañana entretenida con unos compañeros de categoría... =D> =D> =D> =D>
Saludos.
vaaaaaaaaaaaaaaaa¡¡¡
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